TRIGÉSIMO DÍA-
Hablamos un poquito sobre el estar en el momento, y no puedo dejar que te vayas sin guiarte en el proceso de vivir en el momento. Nuestras vidas, literalmente, están hechas de momentos. Cuando termines de leer esta oración un momento ha pasado. La manera en que escogemos vivir nuestros momentos, y aún mas importante, como escogemos ser parte de esos momentos hace toda la diferencia en el significado de nuestras vidas. Piensa en cuales son tus pensamientos en un día cualquiera. La mayoría son en lo que va a pasar o lo que ya pasó. Casi nunca se tratan completamente sobre lo que estamos haciendo en algún momento, estando completamente conscientes del momento.
En este momento estás seguro y haz comido y seguramente estás sentado de manera muy cómoda. Da gracias.
Antes de empezar hoy tus respiraciones, quisiera que te sientes con la espalda recta, el cuello recto y las manos en las piernas, la palma derecha sosteniendo la palma izquierda con las palmas hacia el cielo y los dedos pulgares tocando gentilmente y los ojos cerrados. Toma tres respiraciones a su ritmo natural. Empieza a enfocarte en el suelo bajo ti, el espacio a tu alrededor y donde estás en relación a todas las cosas a tu alrededor. Aunque tienes los ojos cerrados, repasa la habitación donde estás y toma nota de donde está todo. Date cuenta de lo seguro que estás. Date cuenta de que en este momento no tienes que preocuparte por nada. En este momento en el tiempo son solamente tú y tu respiración. Comienza el proceso de tus 10 respiraciones y a medida que inhales, inhala por la nariz y suelta la respiración por los labios. Ahora cambia tu enfoque a tu corazón, y siente la espiración fluyendo por tu corazón. Mientras hagas esto, está consciente de este momento en el tiempo. Date cuenta del regalo que es este momento en el tiempo. Date cuenta que cada respiración es un momento en el tiempo que es valioso e importante por su propio mérito. Solo hazte consciente de justo ahora. Hazte solamente consciente de estar vivo y respirando y seguro justo ahora, en este momento en el tiempo. Al terminar tus respiraciones quédate sentado por un tiempo en silencio. Da gracias.
Disfruta tu día…
Hoy, cuando te laves las manos enfócate en los momentos que pases lavándote las manos. Enfoca en como se siente el jabón en tu piel; cual es la temperatura del agua y como se siente el agua al pasar por las manos lavando el jabón de tu piel. A medida que te seques las manos toma consciencia de como se siente la toalla y como se sienten tus músculos al agarrar la toalla. Enfócate en cada paso de lavarte la manos. Hazte consciente del momento en que estás lavándote las manos y todos los músculos y los movimientos que se requieren para hacerlo. Si lo puedes hacer con los ojos cerrados te dará una experiencia más profunda. Haz esto cada vez que te laves las manos hoy.
Esta noche siéntate de la misma manera en que lo hiciste esta mañana. Trae tu atención a “justo ahora”, al momento presente y practica tus 10 respiraciones con consciencia plena de como se siente tu cuerpo con cada respiración. Siente la experiencia que siente tu corazón cuando la energía fluye por él, y como se siente tu mente al tener la experiencia de todos tus sentidos. Da gracias.
Haz pasado hoy por momentos estando completamente presente en “justo ahora”. Ese momento que es “justo ahora” es lo único que tenemos. No permitas que se te vayan en “lo que fue” o “lo que tal vez pase”. Lo que está hecho hecho está, y el pasado ya pasó. El futuro es tuyo para tener y no tiene caso preocuparte por cosas que lo mas seguro nunca ocurrirán. Enfócate en lo que tienes “just ahora,” en este momento, no en lo que no tienes. Es necesario que sepas que estás exactamente donde tienes que estar en este momento y en cualquier momento en el tiempo. Llévate al sueño sabiendo que el momento presente es tuyo y que por lo tanto, eres rico. Da gracias por este momento en el tiempo.
Que duermas bien…
Namaste-la belleza de mis momentos, es la misma belleza que tienen tus momentos